(Este texto incluye descripciones y discusiones sobre aspectos argumentales del cortometraje. Se recomienda verlo antes de continuar leyendo. Puede adquirirse por USD 2.99 en el siguiente enlace).
ACTUALIZACIÓN 29/02/16: ¡Historia de un oso ha ganado el Oscar 2016 a Mejor Cortometraje de Animación! Una demostración de que, contrario a lo que demuestra la experiencia, las historias de esperanza y redención aún parecen importarle al ser humano.
ACTUALIZACIÓN 29/02/16: ¡Historia de un oso ha ganado el Oscar 2016 a Mejor Cortometraje de Animación! Una demostración de que, contrario a lo que demuestra la experiencia, las historias de esperanza y redención aún parecen importarle al ser humano.
El 2014, tras cinco años de trabajo, se estrenó el cortometraje animado Historia de un oso (Bear Story) [1], creado por el estudio audiovisual chileno Punk Robot y dirigido por Gabriel Osorio. La obra ha cosechado gran cantidad de galardones internacionales (más de 40), destacándose tanto la emotividad de su triste argumento como las alusiones a la realidad histórica y sociocultural chilena.
Llegué a este corto como debiera llegarse a todas las historias importantes: sin bullicio previo, sin contexto. Por supuesto, sabía que la obra estaba acumulando premios y acaparando atención a toda velocidad, pero soy una persona muy lejana al mundo del cine, incluso al de animación, y lo que terminó motivándome fue el hecho de que sus protagonistas fueran osos antropomórficos bellamente diseñados. Me pareció curioso que un país tan renuente a los usos más arriesgados de la imaginación como Chile hubiera optado por esta decisión creativa en una obra que no estaba rotulada como infantil. Pensé que aquí podría haber algo que tendría más posibilidades de resonar en mí que otros trabajos nacionales, y no me equivoqué.
- 9/30/2015
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